Halvdan no es un vikingo adecuado. Está cojeando y los demás niños lo consideran un extraño solitario sin amigos, a excepción del herrero del pueblo Björn, que lo cuida desde que el padre de Halvdan se fue a un viaje de saqueo. Al otro lado del caudaloso río hay una aldea enemiga que ha estado en disputa con la tribu de Halvdan desde que se recuerda. Un día, durante las solitarias excursiones de Halvdan al río, se encuentra con Meia, la hija del gobernante de la aldea enemiga. Se desarrolla una aventura familiar conmovedora y divertida sobre cómo salvar las diferencias y la amistad prohibida.